¡Por fin se acabaron las llamadas fiestas!.
Menos mal que ya podemos ser personas conscientes sin excesos, haciendo lo que el cuerpo nos pida y no la sociedad, somos esclavos de los deseos de una mayoria, que no escucha al cuerpo, sino a los convencionalismos, a las normas, al consumismo, y al barullo mental y social.
A si nos tienen entretenidos,no paramos,no nos relajamos y no reflexionamos, y a si nos olvidamos de nosotros mismos , lo cual no es de ayuda para ser felices y estar en paz. La paz llega cuando estoy en armonia conmigo mismo y con los que están a mi alrededor.
Estoy muy muy feliz de que haya acabado este barullo social.
¡Feliz vuelta a la tranquilidad y a la relajación! Namaste Luisa
No hay comentarios:
Publicar un comentario